En medio de temas políticos, ordenar una oficina, comprar unos regalos, confirmar mis horas médicas, enviar las tarjetas respectivas, buscar tres amigos secretos, terminar las correcciones de la tesis y los ensayos del coro llego la víspera de la noche buena.
Domingo por la mañana y si bien a los pies del árbol de navidad estaban los regalos que quería hacer, mi pesebrera interior estaba muy desordenada, llena de tristezas, enojos y desilusiones.
Viendo que el Niño estaba en la puerta, me anime a tomar la escoba de la confesión y mientras reconocía mi orgullo, falta de verdad y algunas otras cosillas, encontré en mi pesebre interior la luz que había olvidado: mi incansable capacidad de amar.
Así que prepare una cuna de amor del puro, una manta de amigos de los buenos, una mamadera con leche caliente de esperanza y le abrí la puerta para que se dispusiera a nacer.
¡Feliz Navidad!
Y que este 2007 sea inolvidable
2 comentarios:
Muy feliz Navidad Sole,,, y que el nuevo año traiga mucha dicha para ti en todo los aspectos de tu vida..
Millones de cariños y bendiciones
(te quedo hermoso el template de tu blog, me encanto)
besos
Carito
http://diario-de-eva29.blogspot.com/
ya me parecía extraño no haber leído algo nuevo por estos días.
...y se dispuso a nacer...cómo no hacerlo con esos preparativos, eh.
Sin duda será un 2007 inolvidable
Te quiere
Publicar un comentario